miércoles, 5 de septiembre de 2007

¡Esta falta de libertad no tiene nombre!

Hoy leí en el diario que en Venezuela, los padres sólo podrán elegir entre 100 nombres para sus hijos.
El futuro panorama del pueblo venezolano es desolador.
No quiero ser pesimista, pero no por ello debo dejar de ver la realidad.
Si bien es probable que sea revisionada la ley, al no ponerse de acuerdo los legisladores con respecto a los nombres que deberían estar permitidos, optaron por cortar por lo sano: cortaron el abecedario en la letra B.
Debido a esto, tomaron todos los nombres que empiezan con A o B y los incluyeron en el padrón de autorizados. Luego, para llegar a los cien, habrían inventado los faltantes, siempre que iniciaran por A o B.
Nombres como Altolito, Apuchicha, Bidoncho y Burungunganga fueron incorporados al listado en desmedro de otros clásicos como Pedro, Carlos, José o Walter.
Como toda regla tiene una excepción, incluyeron el nombre número 101: Hugo, para congraciarse de esta forma con el presidente. Esto evitó la amenaza del mandatario de derogar la ley ante la posibilidad de tener que cambiar su nombre a Burungunganga Chávez.
En Caracas, en este preciso instante, una marcha del gremio de los Fabricantes de Tazas con Nombre está llamando a la movilización en repudio a la medida. Las razones radican en la depreciación de los stocks de tacitas ya impresas con los nombres ahora prohibidos y que ya no pueden ser vendidas.
El sindicato de los Trabajadores de la Industria de Llaveritos Souvenirs prometió plegarse a la medida.
La sociedad también planteó sus reclamos. ¿Qué porvenir le espera a los sicoanalistas cuando los adolescentes no necesiten terapia al no haber tenido sus padres la posibilidad de ponerles como nombres los de sus tías abuelas o los del tatarabuelo por línea paterna?, ¿alguien pensó en esa pobre gente?.
¿Quién comprará ahora el Gran Libro de los Nombres?
Por lo menos -y he aquí una buena- les quedarán disponibles Angulo y Arturo para solaz esparcimiento de los precoces rimadores clásicos de la escuela primaria.
Ya no podrán referirse a alguien como Mengano o Zutano, sino que aparecerán nuevos figurativos como Atino o Atono.
Y no creo que eso acabe acá. Pronto los apodos también serán acotados y es probable que sólo sean admitidos los números que no superen los setenta mil.
¡Adios al floreciente mercado de los inventores de nombres de personajes para telenovelas y huracanes!
¡Por Jesús!, que alguien detenga esta barbarie.
Perdón... que la detenga Alá o Buda, porque Jesús empieza con jota.

11 comentarios:

Jorge Mux dijo...

Altolito, Apuchicha, Bidondo y Burungunganga fueron compañeros míos del colegio. ¡Cuántos recuerdos!

Anónimo dijo...

Otro clásico de clásicos es Armando, pero la verdad es que al lado de Burungunganga no tiene nada que hacer. No lamentaré la pérdida de Walter.

Weltklang dijo...

Es decir, que en venezuela yo no existo.

slds
W

Trocamundos dijo...

Ufff! Me salvé, que alivio!

Esta noticia no tiene goyete! (porque empieza con "G", cuack!)

Lamentable es pensar que lo que no tiene sentido es la realidad...
Salute.

gabrielaa. dijo...

la verdad es que en Venezuela hay cada nombre... claro que eso no justifica esta medida fascista. todo lo contrario.

Bakunin rules!

Anónimo dijo...

...justo el país de JUAN JOSE PATRICIO, o de ROBERTO LUIS FRANCISCO...!!
Sería como que a nosotros nos eliminaran los apellidos Pérez, Gómez y García!!

Anónimo dijo...

Aunque ahora que lo pienso.......Esos apellidos no son solo argentinos.

María R. dijo...

Como pais en el q abundan los Jonathan y los Bryan (con mil versiones distintas para escribirlos) no me sorprende que Burungunganga se ponga de moda...
A lo mejor este verano imponemos algun otro. A proponer alguno, no?

The Bug dijo...

MariaR, mejor no propongamos nada, que las ideas raras pegan fuerte.

Mantis dijo...

Burungunganga siempre va a ser mejor que Burungungonga.

Porque... digamos que no te quedaría otra más que rendir libre los últimos años del primario y todo el secundario.

No da para ir al colegio así.

Anónimo dijo...

Perdon pero quien mas contento que los fabricantes de tazas y llaveros??? Estandarizan y a la mierda! Nadie va a poder decir (con ojos llorosos) "mi nombre no esta en ninguna taza"....
Me pliego al Bolivariando pais y aplaudo la medida.

Elpidio.