No es que tenga una hija y vaya a casarse, sino que está casado y va a tener a su primer hijo, que en este caso será hija.
Una simple cuestión de distancias hace que me sea imposible regalarle por ahora algo más que no sea una ínfima parte de mi sabiduría empírica resultante de más de una década de experiencia como padre en una familia donde el 66% de sus componentes no tiene pito.
Vayan entonces estas simples pero infalibles máximas para él:
- La diferencia entre convivir con una sola mujer y pasar a hacerlo con el doble -como será tu caso- es tan amplia como pasar, cuando un accidente, de tener un 50% de posibilidades de fallecer a tener exactamente el doble de dicha posibilidad.
- Pasear a la bebé te brinda un extraño y reconfortante magnetismo con las mujeres. ¡Bien!
- Las esposas suelen detectar cuales son los motivos por los cuales uno pasea a la bebé. ¡Mal!
- "No podemos, la bebé está con fiebre/cólicos/ronchitas" será la frase de cabecera a la que siempre podrán apelar cuando con tu esposa quieran zafar de ir a ese lugar al que no tenían ganas de ir.
- Misteriosas fuerzas físicas harán que la cama matrimonial sea ahora más pequeña.
- Dormir parado con un bebé en brazos no sólo es posible, hallarás que las más de las veces puede ser la mejor opción.
- Nunca permitas que tu hija se acostumbre a dormir en tu cama. Al permitirlo estarías ganando algunas horas adicionales de sueño durante los primeros meses pero también dormirás incómodo durante varios años. Dejar que los bebés duerman en tu cama es como sacar un préstamo de $1000 a devolver en 500 cómodas cuotas de $200 cada una.
- Al principio quizás ocurra que la niña prefiera a su madre antes que a vos y eso te haga sentir disminuido, pero antes de la década de vida entrará a confrontar con la madre y a medida que se acerque la adolescencia se volverán -madre e hija- rivales virtuales. ¡Ellas comprarán tu apoyo a cualquier precio! La revancha llegará muy lentamente, pero es muy dulce. No sólo es esto experiencia propia, tambien lo dijeron en un documental sobre leones en el National Geographic.
- Nunca, pero nunca, cuando la nena sea grande y esté entre amigos, le cuentes a éstos sobre las épócas en que ella era capaz de arrancar las sujeciones de los pañales de un solo pedo cuando la lactancia materna le provocaba gases.
- Empezarás a entender a tus padres de una manera que asusta.
- Toda tu ropa, tarde o temprano, empezará a mancharse de rosa luego de alguno de los lavados.
- Descubrirás que no importa cuanto perfumes uses: por lo menos durante el próximo año tus hombros siempre olerán a leche cuajada.
- Inscribirse como voluntario del ejército para una misión humanitaria en Zimbawe es una mejor alternativa que hacerse cargo de los preparativos de los cumpleaños infantiles.
- Acostúmbrate a Barbie. No importa lo que hagas para evitarlo, ella estará al acecho como la prima fashion de Chucky.
- Nunca intentes ser el modelo de persona ideal para tu hija. Sólo lograrás que ella escoja -algún día- un novio basado en ese modelo. Piénsalo seriamente: ¿quién querría dos personas como vos en casa?
Qué sabiduría, The Bug! Y siendo Ud. tan joven! Este post da para mail en cadena :P
ResponderEliminarTuve el honor de recibirlo por mail, en una versión de diez puntos.
ResponderEliminarAh, y por la distancia para enviar los regalos no se haga problema, ya se inventaron los servicios de encomienda para enviar cosas a lugares que quedan lejos.
Una pregunta: ¿es posible apelar a la frase de cabecera del punto cuatro, aun cuando la bebé todavía no ha nacido?
¡¡¡Que asombración!!! Estas enseñanzas deberían ser compartidas con el mundo y por supuesto cumplidas.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Gurisa, ¿acaso hay peor destino para algo que convertirlo en una cadena de mails o en un págüerpoint?
ResponderEliminarJorge, haya suyos también los cinco restantes.
¿Qué es una encomienda?
Profe, llegó tarde: ¡es que ya se cumplen!
Bug, que lindo post! me dió mucha ternura y me quitó las pocas ganas que tenía de ser padre.
ResponderEliminarabrazo
A
¡Me encantó Bug!
ResponderEliminarSe lo haré leer a Mafo apenas lo alcance.
:P
Mis saludos para Don Mux ya pasaré a dejárselos.
La paternidad es un viaje de ida, Ajenjo.
ResponderEliminar¿Mafa, acaso dije que los consejos en su versión original eran para Mux?
Ah, no, ya veo, lo dijo él.
Una ternura Bug... y no sé si Mux tendrá suegra, pero creo que entre los consejos ameritaría algún puntillo al respecto... o sea, si no se cuida no pasa sólo a convivir con 2, sino con tres féminas... :)
ResponderEliminar75% en mi caso, y aunque dos aún sean niñas, y mujer-mujer haya una sola... ya me está preocupando esto de tener un sólo baño.
ResponderEliminarEs todo verdá... lo afirmo yo, que soy la mayor de los hijos de la familia, la primera nieta, la primera sobrina, etc, etc---
ResponderEliminarLo bueno es que papá sieeeempre va a consentir a su pequeña niña, "la nena"... y saben qué? Uds, hombres, no pueden con ello. Es más fuerte que todo su ser. La nena los termia convenciendo SIEMPRE...
:D El extraño poder de la femeneidad. jiji!
No sé, yo de mi suegra no puedo hablar porque me llevo bárbaro.
ResponderEliminarAdemás, yo tengo una maestría en hijas, no en suegras, aunque pensándolo bien, con las suegras tengo más experiencia aún.
unServidor, lo suyo es un apostolado.
Pero no puede quejarse de su suerte, sus hijas son dos soles.
Chuli, yo soy la versión masculina del primerazgo familiar.
Y estoy de acuerdo con usted.